En México hay más de 120 pueblos mágicos y muchos de ellos están a tan solo unas horas de la Ciudad de México.
Si buscas tener un fin de semana relax y alejarte poquito de la ciudad, no dudes en visitar estos pueblos mágicos que ¡están tan cerca que puedes ir y regresar en el mismo día!
El Oro, Estado de México.
A menos de 3 horas de la CDMX encontrarás este paraíso minero que también es parte de los santuarios de las mariposas monarcas que cada año llegan e inhundar los cielos de octubre a marzo.
El Oro es un pueblo muy tranquilo en el que aprenderás mucho sobre la mineria al mismo tiempo que disfrutarás de sus paisajes y arquitectura estilo art nouveau
¿Qué lo hace mágico?: El restaurante dentro del vagón de tren.
No te puedes perder: La presa Brockman.
Amealco, Querétaro
Seguramente conoces a las muñecas Marías hechas por las mujeres otomíes pero tal vez no sabías que son originarias de Amealco.
A tan solo 3 horas de la CDMX, en las calles coloridas de Amealco encontrarás el museo de la muñeca artesanal, en el que además de muñecas, podrás ver unos colmillos de mamut ¡con más de 10 mil años de antigüedad!
¿Qué lo hace mágico?: Las muñecas artesanales son Patrimonio Cultural Intangible de Querétaro.
No te puedes perder: Su gastronomía, en especial el pan de pulque y el mole de guajolote.
Real del Monte, Hidalgo
La cuna del futbol en México se encuentra a 2 horas de la CDMX, en Real del Monte.
Real del Monte tiene una gran tradición inglesa y minera que el caminar por sus calles adoquinadas seguro te hará sentir que estás en alguna ciudad de Europa.
Cuando lo visites no olvides llevar una chamarra y zapatos cómodos.
¿Qué lo hace mágico?: Es el lugar habitado más alto del país.
No te puedes perder: El panteón inglés que fue construido en 1851….y los pastes.
Atlixco, Puebla
Pocos lugares son tan coloridos como lo es Atlixco, que se encuentra a solo 2 horas de distancia de la CDMX.
Atlixco no solo es famoso por ser el pueblo con más iglesias en todo el país sino también por su cercanía al Popocatéptl, el cuál podrás apreciar sin importar en qué punto de Atlixco te encuentres.
¿Qué lo hace mágico?: La villa iluminada de navidad que preparan cada año y sus tapetes floridos.
No te puedes perder: Los viveros, no por nada Atlixco también es llamado la Ciudad de las Flores.
¿Ya sabes cuál será tu siguiente viaje?
Comments